miércoles, octubre 14

trato 1

Me desperté como de un sueño feo,
ochenta veces
quería seguir durmiendo.
No podía levantarme,
a cada rato me despertaba
pero estaba en la misma realidad,
la misma mañana rodeada
de los mismos sueños
de la misma noche
interminable extendida
¡no importa la luz!
¡no importa la luz!

Todo clásico.

Era como haber soñado con un monstruo,
dormido con el piso brillante y frio.
No sé qué soñé, no sé qué
pero estoy perseguida
esta mañana estoy envuelta
No sé qué soñé pero
envuelta de vos

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