Hoy me desperté asustada, algunos sueños demasiado largos. Miré la luz del sol directo como me pegaba en el ojo y todos los rayos solares que reavivaron mis iris iluminaron también mi cerebro como un punzante recuerdo anormal,
la resaca o la fisura que le dicen es como una enfermedad en la que te metiste solito, una reacción adversa, vamos, vamos ahora sí a controlar <ommmmmm
Un gato blanco ovaladísimo tiritaba como neón vencido y revoloteaba por la bóveda críptica ancestral tan tan espeluznante que en un momento en la penumbra un chico indie terrorífico aparece al lado mío
y yo dije que grito!
Grito con toda las fauces abiertas, con la campanita despegadísima de las amígdalas -puedo sentir el aire al rededor de mi campanita despegadísima de mis amídgalas-, abriendo mi cerebro y mi garganta; y lo toco y es como una boca babosa gigante, me chupa un segundo y permite descubrir la pesadilla de un tirón. Puedo controlar un toque, incorporarme para alejarme y reencontrarme con mi cuarto tambaleante que es como una discoteca del fin del mundo donde todo en comparación tiene un sentido terrorífico... TERRORÍFICO
Pero más allá de esto, repito: decime si el ciclo puede cerrar TERRORÍFICO, decime si sí TERRORÍFICO, decime enserio. TERRORÍFICO
No hay comentarios:
Publicar un comentario